Soy una mamá celosa y eso es un hecho. Nunca lo hubiera pensado pero soy de esas que se la pasan todo el día anhelando ver a su pequeña, pensando ¿qué estará haciendo?, ¿cuál será su última ocurrencia?, ¿con qué estará lidiando?, y sintiendo una opresión inmensa en el corazón por todo lo que se está perdiendo.
Soy una mamá celosa y esta emoción me toma por sorpresa y no la comprendo. Esta mañana cuando llegó el bus del colegio y ella grito emocionada : "la ruta, la ruta", me dio mucha felicidad pero también mucho miedo. Miedo a montarla en un vehículo escolar en esta ciudad, miedo a no estar, miedo a perdérmela, a perdernos, a no disfrutar a su lado cada uno de estos nuevos momentos que le corresponde vivir con otros y sin mí.
Soy una mamá celosa y no es fácil serlo. Estaría mejor tomarme todo con tranquilidad. Después de todo tengo una hija tranquila, segura, que se siente como pez en el agua en su nuevo colegio, que quiere asistir hasta los fines de semana, que se despide con un beso, un abrazo y una sonrisa en la boca. Y, como resultado, yo me siento celosa, desplazada, poco importante, abandonada, vacía.
Soy una mamá celosa y, al mismo tiempo, soy una niña insegura buscando atención. No entiendo muy bien como ni por qué pero esta etapa me conecta con ese lado mío que sólo yo sé que está vivo y que existe. Ese lado que se despierta en los momentos menos esperados y que me hace re-conocerme y re-descubrirme de maneras insospechadas.
Soy una mamá celosa y tendré que aprender de este momento. Supongo que estoy acostumbrada a ser el centro de la vida de mi hija, y la entrada al colegio me enfrenta a otra realidad: eso está cambiando y con el tiempo cambiará mucho más. Y me niego a creerlo. Y, de alguna manera inconsciente, no quiero soltarla, soltarme y dejar que todo tome su curso, que fluya.
Soy una mamá celosa y eso es lo que siento hoy... y espero poder darle a este sentimiento un curso acertado muy pronto.
Es natural que sientas celos, como tú misma lo dices, ya no eres el centro de su atención, está descubriendo todo un mundo nuevo allá afuera, sin embargo, sabe que puede volver a tus brazos con toda confianza, porque ahí estarás esperándole con el corazón abierto. Besos.
ResponderEliminarLo sé. Sin embargo, me ha sorprendido montones reconocerme celosa y aprensiva con el tema. Oli, espero que estés muy bien. que las cosas estén mejorando con tus hijas. Te he leído en twitter y quiero que sepas que te pienso mucho así no haya encontrado palabras para ayudarte y aportarte como sé que buscas, como te mereces. Te mando un abrazo gigante. Estas en mi corazón.
Eliminar¡Gracias por tus palabras Zary, me reconfortan mucho! Yo igual te tengo presente aunque no escribas tanto como antes en el blog :) Abrazos recibidos y enviados de regreso.
EliminarYo también y creo q es normal, son tan perfectas q no queremos perdernos un segundo de sus vidas.
ResponderEliminarNo queremos perdernos de nada pero eso es lo que toca. Así que hay que tratar de estar ahí, cuando se está juntas para que ese tiempo baste para ambas. Un abrazo!!
Eliminaray... yo a veces soy tan celosa que imposibilito :D
ResponderEliminarPero confio que el tiempo me va preparando de a poco.
Yo intenso no llegar a eso, pero no puedo tirar la 1era piedra. Gracias por leerme y compartirme tu experiencia con el tema Dulcia. ¿Cómo va todo?
EliminarJo pues no te se decir, por un lado no soporto no saber qué ocurre en esas horas de cole, y por otro Marco no tiene esa independencia todavía ni por asomo y me disgusta, porque se que sufre, me insiste en que no le gusta el cole y en que se acuerda de mí mientras está allí, me encanta la seguridad que tiene Sara... Difíciles emociones
ResponderEliminarUn fuerte abrazo bella!
Por lo visto no hay termino medio en este tema. Te entiendo perfectamente. Tiene que ser muy difícil. Espero que Marco pronto le coja gusto al cole y te lo manifieste de esa manera. Un abrazo comadre.
Eliminarqué precioso texto... es tan difîcil separarse de ese ser que nos ha pertenecido, que ha estado dentro de nosotras, pero que, tenemos que asumir, no es nuestro, ni somos su centro. el dîa que yo la tenga que llevar al cole sufriré seguro tanto como tû...
ResponderEliminarEs complejo, pero por fortuna el tiempo hace que todo se acomode en su lugar y pasa más rápido de lo que creemos.
EliminarUn abrazo!!
Zary, me uno al club de madres no solo celosas, sino recontra celosas! Y eso que antes era peor, he ido mejorando con el tiempo :) A lo largo de mi vida he sido sumamente celosa con todos los que quiero: con mis papás, con mis amigas, con mis novios... entonces, cómo esperar no ser celosa con mi propio hijo? Si tuviera niñera, estaría celosa de la niñera seguro... Pero como te digo, las cosas han ido mejorando con el tiempo. Creo que a medida que van creciendo y te das cuenta de que eres SU mundo y que sin ti se mueren, respiras tranquila y vuelve poco a poco la seguridad. A mí me tomó como 2 años y medio el proceso...
ResponderEliminarUn abrazo!